¿Imaginas tu vida sin la computadora, el teléfono móvil o internet? ¿No, verdad? Pues recuerda que gran parte de la vida de tus abuelos y quizá de tus papás no giraba en torno a estos grandes inventos que han evolucionado de forma exponencial en poco menos de tres décadas.
La tecnología de ubicación en tiempo real, realidad aumentada, lentes de realidad virtual, películas y gráficos en tercera dimensión y un sinfín de posibilidades digitales han generado una enorme industria tecnológica, pero también han cambiado nuestros hábitos y el desarrollo de la humanidad.
Una manera de medir qué tan digital eres es identificando cuánto implementas la tecnología en actividades escolares o en casa. Una forma muy sencilla es comparar lo que haces tú cuando tus abuelos o papás usan una cinta métrica, una grabadora de voz, un reloj despertador, una linterna, una cámara, un podómetro, un cronómetro, o incluso van a una sucursal bancaria para realizar transacciones.
¿Dedicas el mismo tiempo tú a estas herramientas o acciones? La posibilidad de prescindir de todos estos artilugios tecnológicos nos lo dio, justamente, el teléfono móvil -o teléfono inteligente-, porque nos permite tener esas y muchas otras aplicaciones en un solo dispositivo.
Lo mismo puedes grabar y editar videos, que consultar tu estado de salud, o hacer videollamadas en tiempo real con otras personas en el mundo. Todo ello de forma inmediata con un dispositivo que cuente con conexión a internet.
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), en 2022 había en México 93.1 millones de personas usuarias de internet y 93.8 millones de personas utilizaron el teléfono celular.
Según este informe, el 93.8% de los usuarios de internet lo utilizaron para comunicarse; el 90.6% para acceder a redes sociales; 89.6% para entretenimiento y 26.9% para realizar pagos vía internet. ¡Sin duda nuestra vida gira alrededor de la tecnología!
Esos indicadores de usuarios de teléfonos e internet reflejan cómo la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas son áreas importantes en la actualidad porque están ligadas al desarrollo tecnológico que hoy forma parte de la vida de la mayoría de las personas, y que como sociedad nos ha llevado al uso del llamado internet de las cosas o a la creación de la inteligencia artificial o el machine learning.
La tecnología impacta positivamente en diversos ámbitos de nuestra vida como:
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Comunicación: Ha revolucionado la forma como nos comunicamos, permitiéndonos conectarnos instantáneamente con personas en todo el mundo a través de distintas plataformas. |
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Educación: Ha transformado el aprendizaje y la forma en que accedemos a la información desde un dispositivo electrónico. Asimismo, las personas obtienen conocimientos especializados que les permiten avanzar en su ámbito laboral. |
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Salud: Ha revolucionado la atención médica, permitiendo a los profesionales de la salud y pacientes conectarse en línea, acceder a registros médicos a través de una plataforma y recibir diagnósticos remotos. |
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Productividad: A través de diferentes plataformas digitales se aumenta la eficiencia en los procesos productivos de las empresas y se mejora la comunicación entre colaboradores |
Tener profesionistas que sepan desarrollar estas tecnologías contribuye a tener un mejor entorno social y económico. Por ello, al cursar una carrera STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés) contarás con el conocimiento necesario para trabajar en alguno de estos campos con muchas e interesantes salidas profesionales.
El avance de la tecnología ha modificado la vida de millones de personas en el mundo. Por ello, una carrera STEM es una excelente opción para contribuir en el desarrollo sostenible de la humanidad.
Fuentes:
https://repositorio.cepal.org/server/api/core/bitstreams/879779be-c0a0-4e11-8e08-cf80b41a4fd9/content
https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/boletines/2023/ENDUTIH/ENDUTIH_22.pdf
