Historias STEM

Jóvenes mujeres en carreras STEM

By 24 agosto, 2021 No Comments

Si eres mujer y estás a punto de entrar a estudiar alguna ingeniería o te encuentras estudiándola, ¿cuál de estas frases has escuchado en el camino?

“Las ingenierías solo son para los hombres”

“Es muy complicado estudiar una ingeniería y más siendo mujer”

“¿Qué hacen las mujeres estudiando algo tan complicado?”

Lo cierto es que ninguna de estas frases u otra que hayas escuchado sobre ser capaz de estudiar una carrera del área físico matemáticas tienen un sustento, porque no depende del género que puedas o no estudiar algo.

Por otro lado, puede que en el camino hayas encontrado pocos referentes femeninos, aquí te queremos compartir historias de mujeres oaxaqueñas que son inspiración para sus comunidades por haber salido adelante en esta área.

Tania Eulalia Martínez

Ella es ingeniera en irrigación, egresada de la Universidad Autónoma de Chapingo y fue la primera mujer indígena beneficiaria del programa de posgrado para Estudiantes en la Universidad de Arizona: Fulbright. Actualmente reside en Reino Unido y se dedica a la investigación en Antropología, desarrollo internacional y salud pública.

¿Quieres saber si fue fácil para ella?

Ella nos contó, durante el Foro Impulso STEM, que antes de comenzar a explorar el mundo tuvo que lidiar con diferentes obstáculos, incluso familiares, que el camino al éxito es una constante reinvención y hay que estar dispuestas a equivocarnos, pero aprender de ello.

Aunque en un inicio la Agronomía no era su pasión, no desistió de estudiar la carrera. Sin embargo, años después descubrió su gusto por el campo y las ciencias sociales, esto último es importante porque comprendió que, además de poder ofrecer soluciones técnicas, como agrónoma, éstas podrían tener un mejor impacto en la sociedad.

Tania no solo se ha dedicado a estudiar, también ha tomado un papel relevante dentro del activismo indígena en la promoción de la educación en Oaxaca. Impulsa la inclusión de las mujeres y grupos minoritarios en los procesos de educación y ha hablado en diferentes foros sobre la prevención de la violencia de género.

La curiosidad por saber más la ha llevado a diferentes partes del mundo, y aun cuando reconoce que ha sido víctima de racismo, esto no la ha detenido, al contrario, la ha impulsado y ha hecho visible el tema.

Dra. Guiehdani Villalobos

Originaria del Istmo de Tehuantepec, desde joven supo que quería ayudar a su comunidad y que estudiar una carrera en ciencias posiblemente era el camino. Se decidió por la Biología y la investigación de las chinches, insecto que provoca enfermedades que afectan directamente a su comunidad.

Con su trabajo en investigación, ha logrado que los habitantes de su comunidad cobren conciencia sobre cómo los afecta a su salud la presencia de este insecto y que la solución no es que desaparezca, sino que se mantenga alejado de la población.

Los principales obstáculos que enfrentó fueron: la distancia, ya que tuvo que dejar su casa para estudiar en la Ciudad de México y el desconocimiento de las autoridades sobre las enfermedades que causa un insecto como la chinche. Sin embargo, ser mujer no fue un impedimento real para conseguir su objetivo: impactar en su comunidad a través de sus investigaciones que, aunque hubo quienes no tomaban en serio su trabajo, no fue un motivo para renunciar a su sueño.

Estas solo son dos historias de muchas que se pueden contar en todo el mundo, como la de Sara Gilbert, la creadora de la vacuna contra la Covid-19 de AstraZeneca.

Es momento de dejar que los comentarios, que mencionábamos al inicio, afecten las decisiones de las mujeres de estudiar o no una carrera. Todas y todos somos capaces de estudiar en cualquier área.